Síndrome del impostor: qué lo provoca y sus causas principales
Síndrome del Impostor: Tipos, Síntomas y Cómo Superarlo | Nara
El síndrome del impostor es un problema psicológico en el que las personas se sienten atrapadas en un cúmulo de pensamientos y emociones negativas sobre sus capacidades y logros. Una inseguridad y baja autoestima permanente que les hace creer que no merecen los cumplidos que reciben, lo que conlleva un miedo permanente a ser descubiertas como un fraude.
Es un síndrome más prevalente en mujeres y en el entorno laboral.
En la actualidad se ha incrementado por la influencia de las redes sociales y la constante comparación con las vidas de otras personas, así como la presión social para alcanzar el éxito.
Es más prevalente en mujeres y en el entorno laboral, y ha aumentado por la influencia de las redes sociales y la presión social por alcanzar el éxito.
Tipos de síndrome del impostor
Según la Dra. Valerie Young, existen cinco perfiles principales:
- Perfeccionista: fija metas muy altas y considera fracaso no alcanzarlas.
- Experta: cree que nunca sabe lo suficiente y teme ser descubierta como incompetente.
- Solitaria: evita pedir ayuda por considerarlo señal de debilidad.
- Genio natural: espera que todo salga bien sin esfuerzo.
- Superheroína: trabaja más que los demás para demostrar su valía.
¿Cómo identificar el síndrome del impostor?
- Inseguridad y autocrítica excesiva
- Baja autoestima
- Miedo a ser descubierto como impostor
- Dificultad para aceptar elogios
- Atribución del éxito a factores externos
- Insatisfacción constante
- Perfeccionismo
- Sobreesfuerzo
¿Cómo superar el síndrome del impostor?
Si se identifica poder estar ante este síndrome, lo primero de todo es reconocerlo y aceptarlo, y pedir ayuda con un psicólogo para tratarlo cuanto antes y evitar desarrollar problemas de autoestima que afecten a la salud mental de la persona, como depresión o ansiedad.
El psicólogo procurará que la persona se conozca mejor sus capacidades y limitaciones y aprender a reconocer sus éxitos sin minimizarlos y los errores y equivocaciones. También trabajará el sentimiento de desmotivación y el miedo al fracaso. La terapia cognitivo-conductual para ayudar a reformular pensamientos y terapia en grupo o compartir experiencias y sentimientos con amigos también puede ser beneficioso.
Otra estrategia que puede resultar útil es llevar un registro de los éxitos y logros y, después, celebrarlos.