Las estrías o marcas de estiramiento son unas franjas o líneas irregulares de la piel debidas, normalmente, al estiramiento de la misma. Esto sucede generalmente durante el último mes de embarazo, por obesidad, por un crecimiento rápido de los niños o por ciertas enfermedades.
El aspecto de las estrías son líneas paralelas que en un principio se presentan de color rojizo, brillantes y delgadas para, posteriormente, adquirir una apariencia de cicatriz que luego forma un surco en la piel con un coloración blanquecina. Las zonas donde es más común la aparición de las estrías son en mamas, abdomen, cadera y glúteos. A pesar del aspecto poco estético que dejan en la piel, no son dañinas. Hay diferentes tipos de estrías:
- Estrías rojas: se deben a la ruptura de capilares sanguíneos. Es importante evitar el rascado para no agravar la situación.
- Estrías moradas: se trata de una fase intermedia de la estría.
- Estrías blancas: surgen por un déficit de riego sanguíneo en alguna zona del cuerpo y es una señal de que el organismo no es capaz de cicatrizar de manera correcta o lo hace muy lentamente.
¿Cuáles son las causas?
Las estrías se producen como consecuencia del estiramiento de la dermis, que es la capa intermedia de la piel, la que da espesor, flexibilidad y elasticidad. Sin embargo, la epidermis o capa superficial no presenta ningún daño. Esta afectación se produce de dentro hacia afuera dando ese aspecto a la piel.
Factores de riesgo
La capa de la piel llamada dermis protege la piel, la hidrata y ayuda a regular la temperatura de la piel. Está compuesta por fibras de colágeno y elastina y de tejido conectivo que aloja vasos sanguíneos, nervios y diferentes tipos de células. Cuando estas fibras elásticas de piel se desgarran, se producen estrías.
Las estrías pueden afectar a cualquier persona, pero con mayor incidencia al sexo femenino. Cabe destacar algunos factores de riesgo como:
- Tener antecedentes personales y familiares
- Ser mujer
- Embarazo y con mayor incidencia en mujeres más jóvenes
- Crecimiento rápido en la adolescencia
- Aumento o pérdida de peso rápido
- Toma de corticoides
- Tras la cirugía de agrandamiento de pecho
- Realizar ejercicio con toma de esteroides anabolizantes
- Padecer algún trastorno genético como el síndrome de Cushing o el de Marfan
Cómo se eliminan las estrías blancas
Las estrías son inofensivas y no requieren tratamiento. Los tratamientos pueden atenuarlas pero es posible que no las haga desaparecer por completo.
Es fundamental una buena hidratación de la piel y una exfoliación cuidadosa.
También se puede tratar sin ningún riesgo con:
- Láser de CO2: renueva totalmente las células y elimina las estrías. Su efecto es rápido.
- Peeling de ácido retinoico: aplicándolo directamente en la zona afectada.
- Dermaroller con aguja: estimula la formación de colágeno y elastina eliminando la estría. Se realiza con una aguja de 2 mm.
- Dermoabrasión: elimina la capa más superficial de la piel haciendo que la estría quede disimulada.
- Intradermoterapia: permite la disminución de la estría y mejora su aspecto mediante productos químicos inyectados.
- Galvanoterapia: a través de la corriente galvánica estimula la producción de colágeno y elastina. Se trata de un mecanismo invasivo y potente.
¿Cómo prevenir las estrías?
Las estrías son difíciles de eliminar, pero se pueden prevenir.
- Mantener un peso adecuado sin cambios bruscos del mismo
- Mantener un actividad física diaria
- Llevar una buena hidratación de la piel, en especial durante el embarazo
- Beber mucha agua
- Tomar una alimentación rica en fibra
- Comer alimentos ricos en vitaminas A, C y D por su ayuda a la formación de tejidos blandos y cicatrización
- Tomar alimentos ricos en Zinc por su efecto cicatrizante
- Evitar el consumo de grasas
- No rascar la piel de la zona de estrías
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