La terapia miofuncional es el conjunto de técnicas o procedimientos dirigidos a la prevención y rehabilitación de las disfunciones o desequilibrios de los músculos orofaciales que pueden interferir, tanto en la producción del habla, como en la estructura de las relaciones entre dientes y mandíbula.
Por lo tanto, esta terapia trabaja sobre el sistema bucomaxilofacial, que es el encargado de funciones vitales como la respiración, succión, deglución, masticación y el habla. También de otros actos como bostezar, llorar o vomitar, por ejemplo.
¿En qué consiste la terapia miofuncional?
La terapia miofuncional centra su trabajo en el área bucal, oral y fonatoria que tienen que ver con las funciones del habla, respiración, deglución, llanto, bostezo, vómito, escupir, etc.
Consta de cuatro fases que son la prevención, evaluación, diagnóstico y corrección, tanto de las malformaciones, como de los hábitos dañinos que afectan a esas funciones.
El profesional evalúa y explora al detalle la zona orofacial para identificar la presencia de alguna anomalía. Después, realiza un diagnóstico detallado para poder establecer un plan de rehabilitación con ejercicios específicos para cada paciente. Se tiene en cuenta la edad, la patología, el nivel cognitivo y el estado general de la persona. Durante la terapia se van haciendo evaluaciones periódicas para ver los avances o si es necesario corregir los planes de trabajo para llegar al objetivo final.
Esta terapia consiste en masajes y manipulación directa de la zona con el objetivo de conseguir que haya mayor sensibilidad y movilidad para promover una reeducación frente a malos hábitos. Otro tipo de terapia es el uso de texturas y temperaturas enfocadas para trabajar tanto la hiposensibilidad en la zona como la hipersensibilidad.
Para qué sirve la terapia miofuncional
Este tipo de terapia sirve para:
- Equilibrar o compensar las estructuras óseas implicadas a nivel orofacial
- Equilibrar y compensar las estructuras musculares a nivel orofacial y las zonas contiguas
- Crear nuevos patrones neuromotores de comportamiento
- Mejorar la estética orofacial del paciente
- Reducir o eliminar aquellas funciones innecesarias
Ejercicios de terapia miofuncional
- Ejercicios de control postural:
- Caminar exagerando el movimiento de talón-punta de cada pie
- Andar de puntillas hacia adelante y hacia atrás flexionando los dedos al máximo y manteniendo el equilibrio
- Intentar coger una pelota, con diferentes texturas, con los dedos de los pies
- Sujetar un palo con los brazos tanto vertical como en horizonte sobre la espalda
- Ejercicios respiratorios:
- Inspiración y espiración nasal o bucal rápido y lento en diferentes tiempos
- Soplar diferentes materiales como pompas, matasuegras, bolitas, etc.
- Ejercicios de movilidad orofacial:
- Abrir y cerrar la boca
- Morder el labio superior
- Poner morro y moverlo a la derecha e izquierda
- Doblar los labios hacia afuera
- Apretar los labios
- Sacar y meter la lengua
- Mover los carrillos hacia afuera y hacia adentro
- Doblar la lengua hacia adentro y hacia afuera
- Ejercicios masaje peribucal:
- Realizar movimientos circulares con los dedos alrededor de los labios en ambos sentidos
- Ejercicios de articulación-fonación:
- Repetir algunas sílabas exagerando el movimiento labial como MA, MO, MU, PUPA, BOPE, etc.
- Repetir sílabas presionando la punta de la lengua con los pliegues del paladar como NA, NO, UN, NE, NI. LA, LO, LANA, LINU, etc.
- Observar el movimiento de los labios al pronunciar ciertas palabras como LAÑAKA, NECHIKU, que simulan el movimiento de los labios al deglutir.