Los dedos en garra son un tipo de deformidades más frecuentes que afectan a los pies. Se caracteriza por presentar una hiperextensión de la articulación metacarpofalángica seguida de una flexión de las articulaciones interfalángicas proximal y distal. Se trata de un tipo de deformidad común en las mujeres debido a que el tejido conectivo es más blando y elástico que el de los hombres.
En un principio no da lugar a molestias pero, a medida que continúa la deformación, causa un dolor insoportable además de un problema estético. Los dedos en garra pueden restringir las actividades de la vida diaria. Crean problemas funcionales y alteraciones biomecánicas de todo el pie, incluso en la región dorsal debido a la presión y fricción ejercida por el calzado.
Tratamientos y ejercicios para los dedos en garra
El tratamiento para los dedos en garra depende del estado de deformidad en el que se encuentre el dedo o los dedos y puede ser:
- Tratamiento conservador: es la primera opción cuando el dedo no está en una fase muy avanzada. Consiste en la ejecución de una serie de medidas preventivas con el fin de corregir o compensar de una manera pasiva la incipiente deformación. Podemos encontrar plantillas, férulas nocturnas, vendajes, separadores subdigitales entre otros. El calzado debe ser cómodo y que alivie la presión de los dedos en la puntera.
Realizar ejercicios que fortalezcan la musculatura que se ha empezado a atrofiar y produciendo el inicio de la deformación.
Cuidar los pies a través de la pedicura para limar las callosidades y durezas que se producen por el roce.
- Tratamiento quirúrgico: suele ser la única solución en la mayoría de los casos cuando el tratamiento conservador no es eficaz o cuando el estado de los dedos está en una fase muy avanzada.
Se trata de un procedimiento muy sencillo en el que, a través de dos incisiones por debajo del dedo en garra, se realiza una serie de procedimientos a nivel óseo y de tejidos blandos para redirigir el tendón flexor y corregir la postura del dedo.
¿Qué otras deformidades de los dedos del pie existen?
Además del dedo en garra también se pueden producir otras deformidades en los dedos como son los dedos martillo y dedos en maza que producen desequilibrio en los músculos, tendones o ligamentos encargados de mantener rectos los dedos de los pies.
En estas deformidades tiene mucho que ver el tipo de calzado que se usa, la estructura del pie, ciertas enfermedades y traumatismos recibidos.
Para aliviar el dolor y la presión se puede usar un calzado cómodo o usar plantillas y, en los casos más graves, se recomienda la intervención quirúrgica.
- Dedo martillo: aparece una curva anormal en el medio de la articulación del dedo. Afecta principalmente al segundo, tercero y cuarto dedo.
- Dedo en maza: afecta a la articulación más cercana a la uña del dedo.
¿Cómo se previenen los dedos en martillo?
Los pies sirven para caminar y correr por lo que son demasiado valiosos como para darles el cuidado que se merecen.
Para prevenir los dedos en martillo es recomendable el uso de un calzado adecuado, que no apriete, que no tenga un tacón superior a los 3 cm y evitar contraer los dedos al caminar.
Al llegar a casa debemos descalzarnos, lavarnos los pies e hidratarlos adecuadamente. Realizar ejercicio con ellos, por ejemplo, coger una canica o un lápiz con los dedos o abrir y cerrar los dedos durante unos minutos. Con ello se gana flexibilidad y elasticidad en los músculos.
Los chequeos y revisiones periódicas son muy importantes para detectar futuras deformidades de este tipo. Además, unos hábitos de cuidado son imprescindibles para prevenir estas afecciones para las que muchas veces existe una predisposición genética. Con nuestros seguros de salud familiares, individuales e infantiles tienes incluido Plan Vida Sana, que cuenta con todo tipo de pruebas complementarias relacionadas con la podología, y que normalmente no cubren los seguros, a precios especiales en los mejores centros y clínicas.