La movilidad articular es la capacidad de movimiento que presentan nuestras articulaciones.
Las articulaciones son como engranajes que comunican partes del cuerpo y funciones y, por lo tanto, son responsables del buen funcionamiento del cuerpo.
Cuando la movilidad es adecuada, permite al cuerpo soportar movimientos repetitivos y grandes cargas de fuerza sin producir lesiones.
Desde que nacemos vamos desarrollando una increíble capacidad de movimiento, tenemos plena flexibilidad y rangos de movimiento completos. Poco a poco perfeccionamos el control motor, añadiendo estabilidad y coordinación. Nuestro primer logro es soportar el peso de la cabeza y, después, pasamos a rodar, gatear, ponernos en posición de sentadilla, caminar, correr, saltar, etc.
Para que nuestro cuerpo funcione correctamente, nuestros huesos, articulaciones y músculos han de ir en sintonía, fuertes y flexibles, con buen rango de movimiento que nos permita adaptarnos a cualquier circunstancia.
Lamentablemente, la sociedad actual nos ha hecho la vida tan cómoda y fácil que nuestro cuerpo se ha debilitado, ha adquirido malas posturas debido al uso de las tecnologías, sedentarismo, pereza, largas jornadas de trabajo o estudio, que ha generado una pérdida de la densidad ósea, fuerza y movilidad que desencadenan lesiones y problemas estructurales.
Ejercicios de movilidad articular
La movilidad articular está relacionada con la flexibilidad, la elasticidad y la amplitud de movimiento. La práctica del ejercicio físico de manera regular determina un menor riesgo de perder movilidad.
Algunos ejemplos de movilidad articular pueden ser:
- Cuello:
- Flexionar y extender suave y lentamente el cuello con movimientos de cabeza hacia arriba y hacia abajo.
- Mover el cuello haciendo girar circularmente la cabeza de forma muy suave y lenta en uno y otro sentido.
- Hombros:
- Levantar los hombros y llevarlos hacia atrás y hacia delante en un movimiento circular y manteniendo los brazos pegados al cuerpo.
- Poner los brazos en cruz y hacer movimientos circulares alternativamente hacia adelante y hacia atrás.
- Brazos y muñecas:
- Estirar los brazos y flexionar los codos llevando la mano hasta tocar la espalda.
- Mover las muñecas en círculo en un sentido y otro.
- Flexionar las muñecas llevando las manos hacia arriba y abajo.
- Piernas, rodillas y tobillos:
- Sentados en una silla, elevar alternativamente las piernas hacia adelante y recorrer un semicírculo hacia atrás.
- Sentados en una silla, hacer rotar alternativamente los tobillos en ambos sentidos.
- Doblar la rodilla sujetando el pie con la mano por detrás de la pierna.
- Columna y caderas:
- Situados en posición a cuatro patas, arquear la espalda hacia arriba y abajo.
- Tumbados boca abajo, arquear la espalda con el vientre apoyado en el suelo y estirando el tronco hacia arriba.
Movilidad de cadera
Trabajar la movilidad de la cadera es fundamental. Permanecer sentados durante un periodo de tiempo prolongado afecta la movilidad de la cadera al acortar los flexores de la cadera y debilitar los músculos de los glúteos.
La articulación de la cadera es la responsable de unir el tronco con la extremidad inferior. Se trata de un área anatómica compleja, donde existen más de 15 músculos asociados con la cadera y cada uno de ellos trabaja en conjunto para proporcionar movilidad a la articulación.
Realizar ejercicios de cadera mejora y amplía el rango articular, evita sobrecarga articular, libera presión muscular, mejora la relación con el psoas, previene el dolor y potencia los movimientos explosivos.
Ejercicios de movilidad articular de rodilla
Ejercitar la movilidad articular es imprescindible y evita posibles lesiones e incluso desgarros.
Algunos ejercicios articulares de rodilla son:
- Sentadillas: con los pies separados más que la anchura de la cadera, el peso del cuerpo sobre los talones y la cadera hacia atrás imitamos el movimiento que haríamos para sentarnos en una silla.
- Estando de pie, abrimos las piernas en forma de V invertida. Flexionamos una rodilla y bajamos el cuerpo hacia el lado de la rodilla flexionada. Las manos pueden estar apoyadas en la cabeza o cintura.